Logo dominicosdominicos

Blog Nihil Obstat

Martín Gelabert Ballester, OP

de Martín Gelabert Ballester, OP
Sobre el autor

25
Oct
2006

¿Quién convoca?

8 comentarios
El siguiente día de las manifestaciones a favor de la “pobreza cero” presencié la siguiente conversación. Un padre de familia contaba que estuvo presente, junto con sus dos hijos adolescentes, en la manifestación. Uno que le escuchaba preguntó quién convocaba. La pregunta no tenía intencionalidad alguna. Pero me hizo pensar. Porque, a veces, lo que nos importa no es la justicia de una causa, sino saber quien está a favor y quien en contra.

Tomás de Aquino hizo suyo este axioma: “toda verdad, la diga quien la diga, proviene del Espíritu Santo”. Incluso si, por hipótesis, fuese el diablo quien la dijere. Porque en este caso el diablo laboraría contra sí mismo, lo cual debería alegrarnos. Lo importante no es quien dice o quien hace. Lo importante es si dice y hace bien. La diga quien la diga, un cristiano está a favor de la verdad. Lo haga quien lo haga, un cristiano está a favor del bien. Y lo apoya. Cuando un partido político promueve leyes que favorecen la integración social, lo importante es la integración social y no tanto qué partidos votan esas leyes. Cuando un grupo cristiano o un obispo trabajan en favor de la paz o se esfuerzan por celebrar bien los sacramentos, lo importante es la paz y la buena celebración y no si el obispo o el grupo me resultan más o menos simpáticos. La reflexión puede prolongarse: a la hora de cubrir puestos de responsabilidad, ¿se prefiere a personas competentes o a personas sumisas?

Los primeros discípulos de Jesús también cayeron en el error de pensar que lo importante de las buenas causas es quien las hace. Por eso manifestaron su desacuerdo ante uno que echaba demonios porque no pertenecía a su grupo. Jesús les sacó de su equivocación: echar demonios es una buena cosa, porque redunda en favor de las personas. Por tanto, debemos alegrarnos y apoyar al que los expulsa, sea quien sea.
Posterior Anterior


Hay 8 comentarios, comparte el tuyo

En caso de duda, puede consultar las normas sobre comentarios.

Aviso: los comentarios no se publican en el momento. Para evitar abusos, los comentarios sólo son publicados cuando lo autorizan los administradores. Por este motivo, tu comentario puede tardar algún tiempo en aparecer.

Cancelar repuesta


JMValderas
25 de octubre de 2006 a las 11:18

Querido Martin, siguiendo al Estagirita, afirmaba también Santo Tomás que operari sequitur esse. El obrar sigue al ser. En moral, que las acciones son del sujeto. Y aunque la verdad es la verdad, dígala Agamenón o su porquerizo, lo cierto es que conviene andar avisados sobre los fines que se buscan, incluso con ropajes de bondad, incluso, en palabras del Señor, lobos con piel de corderos. Acaba de salir una dura condena de la Conferencia Episcopal contra la legislación socialista sobre maniopulación embrionaria. Parece un acto bueno: curar la enfermedad hereditaria de un hijo. Videtur quod non. ¿Quién va a negar la bondad del hecho? Pero se requiere sacrificar un embrión hermano. Non est faciendum mala ut deveniant bona. En román, el fin no justifica los medios. No sólo no debe votarse lo que parece bueno, sino que la responsabilidad del votante más lejos. ¿Por qué votó a quien sabía que las leyes que había de traer eran intrínsecametne perversas? Porque intrínsecametne perverso es atentar contra la vida. Hay que apoyar todas las causas buenas, hay que adherirse a todo reflejo de la verdad. Pero a las causas buenas y a la verdad que son fines en sí mismas.

JMValderas
25 de octubre de 2006 a las 11:27

Además de alguna reiteración innecesaria, pido disculpas por la concordancia vizcaína. Debí decir: Non sunt facienda mala, etcétera.

Tertio Excluso
25 de octubre de 2006 a las 13:36

Claro que hay que preguntarse quién convoca, pero antes la pregunta adecuada es por las acciones para convertir en 0 la pobreza. (Esta respuesta suele estar ligada a quien convoca). Efectivamente, todos queremos eliminar la pobreza, pero las razones de unos o de otros, o de los de más allá suelen diferir mucho. Hay acciones bienintencionadas que más que paliar o eliminar aumentan la misma.

Este padre de familia que menciona Martín empezaba a preguntarse qué hacía allí (la faltó un paso más), pero no obstante fue más lejos de aquellos que fueron sin saber qué medidas apoyaban, si eran adecuadas o no, y quién convocaba. Esto también es pobreza, pobreza informativa.

dominico
25 de octubre de 2006 a las 19:01

Me da la impresión que a pesar del Evangelio hay quien piensa que "por el poder de Belcebú echaba Jesús los demonios".

Tertio Excluso
25 de octubre de 2006 a las 21:14

Cierto, "dominico"..... el problema está cuando los demonios no son expulsados, sino que entran más y los ya entrados mejor se apacientan y viven.

santiago rodriguez
27 de octubre de 2006 a las 01:50

Este padre de familia, si hace la pregunta para sumarse a la manifestación segun la dirección de donde venga, no está intentando apoyar la Verdad, sino su verdad conveniente o simpatizante. La verdad se llevá en el corazón y si analizamos nuestra conciencia sabremos cual es ; pero se lo hacemos por simpatía aunque sea la verdad real su efecto queda desfasado.
Por otra parte P. Gelabert, entiendo que con las palabras de que aunque la verdad venga del mismo diablo sigue siendo la verdad es solo metaforico, pues la verdad nunca la puede pronunciarla el demonio; el mismo Jesús dijo que era el padre de la mentira y mentiroso desde sus comienzos

internauta
27 de octubre de 2006 a las 11:44

Las semillas de Verdad del Espíritu se encuentran en la génesis del universo,del ser humano, de todas las religiones, diversas sendas hacia un único Misterio Y se plasman de formas diversas, como diversas son las manifestaciones que Dios quiso para sus criaturas. Por eso, hay que apoyarlas. No porque representan a un sector de la humanidad, sino porque es bien que provienen de Dios,Sumo Bien. Gracias, Martín, por no poner vallas ni muros al Amor, por abrir las ventanas a la suave brisa del Espíritu, allá donde sople.

Makarios
30 de octubre de 2006 a las 01:58

Pues va a ser que no. Esta frase, que viene siendo casi la clave para entender a determinados grupos, viene aquí que ni pintada. Veamos: ¿Apoyamos la idea de pobreza cero?, SI, obviamente y absolutamente sí. Pero la forma de plantear el problema y los cauces que se van a seguir para conseguirlo pueden ser tan diferentes y contradictorios que se esté a favor de uno y en contra de otro. No carece de importancia la pregunta: ¿Quién convoca?, porque según el convocante se va a apoyar una idea, y una praxis determinada. Radicalizando al extremo dos posturas, me atrevo a desafiar a ustedes a no preguntar ¿Quién convoca? Dos formas de conseguir la pobreza cero que convocan sendas manifestaciones: a) procurando la redistribución de la riqueza, evitando el despojo de unos por otros. b) eliminando a los pobres. Creo que si ahora le invito a asistir a la manifestación encontrarán que es perfectamente lógico, lícito, justo y necesario, preguntar ¿Quién convoca? De hecho cuando acudo a una manifestación, siempre voy en función de una idea que creo que hay que defender y una forma de defenderla, y esto segundo está en función de quién convoca.
Un abrazo

Logo dominicos dominicos