Ene
Vaticano II: Concilio pastoral y dogmático
7 comentariosEl levantamiento de la excomunión a los obispos consagrados por Mons. Lefebvre ha alegrado a sectores tradicionalistas y conservadores de la Iglesia católica. Allá cada uno con sus alegrías y sus disgustos. Algunas manifestaciones escritas han tratado de desvalorizar al Concilio Vaticano II, como siguen haciendo los seguidores de Lefebvre, recordando que se trata de un “Concilio pastoral”. Cierto, ese fue el calificativo que empleó Juan XXIII. Seguramente los participantes en los foros en los que se ha recordado, con mala intención y poco conocimiento teológico, que el Vaticano II fue un Concilio pastoral, no se cuentan entre mis lectores. Pero aprovecho la ocasión para clarificar este aspecto para los lectores habituales de los blogs albergados en nuestra página.
Pastoral es toda la actividad de la Iglesia, siguiendo las huellas de Jesús, el buen Pastor. Toda su doctrina, su enseñanza, sus dogmas, son pastorales. Pastoral no se opone a dogmático, ni designa doctrina de segundo nivel. Pastoral es un modo de exponer. El Vaticano II buscó una mejor comprensión de la doctrina católica, una presentación actualizada del mensaje evangélico. No hay diferencia entre magisterio dogmático y magisterio pastoral. Todo magisterio y toda teología tienen un carácter pastoral.
No hay que olvidar, por otra parte, que dos importantes constituciones del Vaticano II, las que tratan de la Iglesia y de la Revelación, llevan en el título la precisión de “Constitución dogmática”. Ocurre que estas constituciones se presentan con un estilo más asequible y más propositivo que las constituciones de Concilios anteriores. Y no sólo no tienen menos valor que las constituciones de los Concilios de Trento y Vaticano I, sino más. Más, porque son actos más recientes del Magisterio, ofrecen precisiones más acordes con la realidad actual, responden a los problemas nuevos que se le han presentado a la Iglesia y están destinadas, no a los creyentes del pasado, sino a los creyentes de nuestro tiempo.