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Jun2007Lo que no dice y lo que dice la prensa
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Jun
Voy con la noticia que sí ha salido en la prensa. Un párroco pretendía, ni más ni menos, que impedir la recepción de los sacramentos a los niños matriculados en la dichosa asignatura de Educación para la Ciudadanía. Ha tenido que intervenir el Arzobispado de Toledo para decir que a tanto no hay que llegar. Lo del párroco es un ejemplo del fanatismo al que pueden conducir determinados modos de entender la fidelidad. Dicho de otro modo: cuando se es más papista que el Papa, se ha dejado de ser papista. Conviene que los católicos sepamos discernir, valorar con criterio las distintas intervenciones de nuestros Obispos. En ese temita de la asignatura ya saben ustedes que hay, dentro de la Iglesia, opiniones para todos los gustos. No quiero ahora entrar en ese debate. Pero sí notar que hasta en lo que se considera bueno puede haber exageraciones o derivaciones que hacen malo eso bueno. El problema de los extremos es que impiden ver los matices. Los matices, sí, tan elegantes, tan sabios en ocasiones. ¿Les parece Tomás de Aquino un buen modelo en eso del matizar?