Sep
Reconciliación y adoración
10 comentariosCompruebo que mis crónicas sobre el Capítulo han tenido difusión. Las he leído en “Periodista Digital” y en una página de los dominicos latinoamericanos. Por otra parte agradezco las buenas palabras que me han dirigido bien personalmente, bien aprovechando este mismo blog. Mi intención es que la próxima crónica salga el lunes, una vez que haya sido elegido el Maestro de la Orden y desde el Capítulo se haya informado de su nombre a la Santa Sede.
Un detalle que puede interesar a los lectores es el horario de este sábado por la tarde, víspera de la elección. Yo la califico de tarde para la reflexión. Supongo que para facilitarla el comité organizador del Capítulo ha propuesto dos actos, entiendo que complemente libres, pero significativos. Los cuento con un cierto miedo de que me llamen la atención por desvelar secretos de familia. Pero hay secretos que conviene conocer, para así hacerse una idea más exacta de los amigos. Este sábado por la tarde a las 16 horas está previsto un “Reconciliation Service” y a las 17 horas una “Exposition of the Blessed Sacrament”. Vamos, que todos los capitulares tendrán la oportunidad de confesarse y luego de permanecer en adoración ante el Santísimo Sacramento. ¡Para que vean ustedes lo buenos y piadosos que somos los frailes! Por cierto, hablando de cosas piadosas tengo que decir que tanto la Eucaristía, como los Laudes y las Vísperas son totalmente cantados. Por cantar, hasta se canta la oración de los fieles. La Eucaristía y la liturgia va alternando el español, el francés y el inglés, aunque he de decir que el Padre nuestro suele cantarse en latín. Y por supuesto el día termina con el canto de la Salve, también en latín.
Secretos de familia. De una familia bien avenida. Hoy he escuchado esta definición de los dominicos: “un grupo de hombres que están desunidos por el mismo ideal”. Tómenlo con humor. Interpreto: un grupo de varones, que teniendo un mismo ideal, una misma pasión, la de la predicación, se sienten libres bajo la gracia y respetan y potencian la personalidad y las cualidades de cada uno. De varones y mujeres, porque las mujeres son tan dominicas como los varones. Pero el capítulo es de varones, precisamente porque se respeta la autonomía de las monjas, aunque en el Capítulo hay dos hermanas de clausura, dos religiosas dominicas de vida activa y dos laicas dominicas que, como invitadas, están presentes con los ojos bien abiertos, observando todo lo que pasa. Y también haciéndose escuchar.