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Blog Nihil Obstat

Martín Gelabert Ballester, OP

de Martín Gelabert Ballester, OP
Sobre el autor

1
May
2010

Legionarios de Cristo: otra autoridad, otra formación

8 comentarios

La noticia eclesial del día es el comunicado de la Santa Sede sobre el resultado de la inspección a los Legionarios de Cristo. El comunicado no aporta datos nuevos. Confirma que Marcial Maciel tuvo comportamientos objetivamente inmorales confirmados por testimonios incontrovertibles. No se dice nada de los 20 o 25 mil millones de euros que, según algunas fuentes, controlan los Legionarios. Sí se dice que “gran parte” de ellos no estaban al corriente de las tropelías del fundador. Es una manera de decir que algunos sí lo sabían. ¿Quiénes? Es de suponer que sus más estrechos colaboradores, los que ahora están al mando de la Congregación. El comunicado de la Santa Sede no anticipa qué medidas concretas tomará Benedicto XVI para reconducir la situación. Me sorprendería que entre estas medidas no estuviera la destitución de la actual cúpula de la Legión. No estaría mal que se tomase ya alguna medida cautelar, a la espera de las definitivas.

El comunicado aporta tres elementos importantísimos, validos para todas las instituciones eclesiales. Uno sobre el carisma de la Congregación, que debe definirse por el seguimiento de Cristo y no, como ha sido una tentación permanente, por el nombre del fundador. Sobre todo, los fundadores modernos han cultivado en exceso el culto a la personalidad, lo que conlleva que los miembros de sus instituciones asuman de muy mala gana cualquier observación crítica sobre su líder. Otro se refiere a la necesidad de revisar el ejercicio de la autoridad, que debe estar unida a la verdad. La verdad exige claridad, no es posible que resplandezca allí donde hay secretismo, donde no se puede hablar claramente, donde no se da información sobre el por qué y el para qué de las cosas, o sobre dónde están los dineros y cuántos hay.

Finalmente se habla de preservar el entusiasmo de la fe de los jóvenes por medio de una adecuada formación. Cosa que me parece importantísima, porque sin formación el entusiasmo deriva en fanatismo, y no hay modo de anunciar el Evangelio al mundo de hoy. Me temo que esto de la formación no ha sido el fuerte de los movimientos, grupos, congregaciones modernas que, a lo sumo, la han sustituido por un biblicismo acrítico o por una supuesta fidelidad al Magisterio, reinterpretado por el fundador, sin saber muy bien lo que es o no es Magisterio, ni tampoco los motivos por los que el Magisterio dice lo que dice.

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Maestro solo Uno
2 de mayo de 2010 a las 12:38

Importante lo que subrayas, Martín,sobre el personalismo de los fundadores. Uno solo es nuestro Maestro. Las relaciones de poder-sumisión, y sus redes de apoyo de mutismo- secretismo,a veces vienen impuestas para que una persona sea aceptadas en esos grupos. Y si la mezcla es de poder y dinero, muy a menudo acaba en delito. Lejos todo ello del mensaje evangélico. Tambien la " papolatría".

Lo que está en crisis es una determinada dinámica eclesial. ¿ Para evangelizar son necesarias inversiones millonarias en concentraciones y manifestaciones multitudinarias ? Quizá se ha tardado 13 años en publicar la declaración sobre los legionarios, porque llenaban las arcas vaticanas. Y llenaba los estadios.
¡ Ay¡ esa foto de JP II bendiciendo al fundador-delincuente, y proponiendolo como modelo de juventud !. ¿ Canonización súbita con estos mimbres?
Falta resarcir económicamente a las víctimas. Porque antes del futuro del movimiento eclesial, está el presente de las víctimas. Y ya que se evitó el juicio al delincuente, al menos una contraprestación económica, de los miles de millones acumulados, si es que queda algo despues de las reclamaciones de sus hijos.

Dudo que tengan mucho interés en el tema de la formación. Porque una persona formada, tiene criterio propio, plantea alternativas. Y hoy se potencia la obediencia sino ciega, si medio- tuerta, seguidismo antes que creatividad,e investigación: amarrar el pasado antes que abrir nuevos horizontes al futuro.

"Todo lo hago nuevo", nos recuerda la liturgia de hoy. Un nuevo Pentecostés en el horizonte. Saludos cordiales

todos pueblo de Dios
2 de mayo de 2010 a las 14:57

" Somos un pueblo que camina..cantamos al inicio de la Eucaristía.

Importa en la Iglesia retomar toda la enseñanza del Vat II sobre la Iglesia como Pueblo de Dios. Pueblo de Dios, somos todos,sacerdotes, religiosos, no solo los católicos de a pie o "de tropa". Jesucristo estableció relaciones horizontales -os llamo amigos- con discípulos y discipulas. Relaciones de colaboración, fraternas. No de dominio ni de poder. Quizá está llegando el tiempo volver a la raiz del mensaje evangélico, de actualizar reglas religiosas medievales, de poner nuestra mirada en Cristo.
Hay que limpiar la Iglesia, sí, pero tambien actualizar los organigramas, al tiempo y los creyentes de hoy. Una institución que no responde a las necesidades del tiempo en que vive, deja de ser referente. Y la Iglesia es sacramento. Necesitamos que sea sacramento vivo.

Suena a utopía ¿verdad?. Evangelio

josemaría esteve i pallarés,op
2 de mayo de 2010 a las 18:03


Me siento muy avergonzado. No solamente por el escándalo que significa el abuso sexual de menores,sino por todo lo que estos hechos han desnudado: una institución al servicio de sí misma,cubriendo delicuentes,ocultanto la verdad.
Nada más ajeno a la misión que Jesús encomendo a sus discípulos@. Nada más parecido a aquello que Jesús más detestaba y no se cansó nunca de denunciar: el abuso del poder religioso para herir a los más indefensos.

Las primeras reacciones públicas de algunos jerarcas y de los nuevos movimientos no han hecho sino sembrar mayor desazón. Hablar de campañas de odio,,encerrarse en el silencio ante la exigencia de los fieles,es abordar el problema dede una actitud definida en castellano como cara dura.

El encubrimiento de Marcial Maciel sería impensable sin el enorme poder económico
que su obra ha acumulado y le ha permitido abrir de par en par puertas en altas esferas. Una iglesia en la que el dinero termina por convertirse en la "prioridad apostólica",no es la iglesia de Cristo.

Isabel
2 de mayo de 2010 a las 18:33

Hola Martin:seguro que tendrás comprensión conmigo y,es por esto que me atrevo a comentarte lo siguiente:
Primero:¿Podría una persona enriquecer a otra si su espíritu no estuviera conectado con la Verdad del Evangelio?Como soy ignorante en estos temas mi comentario versa sobre los Legionarios,lo que comentas esta semana en tu blog.
Creo que,debo decirte en honor a la Verdad que los Legionarios que he conocido a lo sumo unos cuatro en total,hará cosa de dos años que celebraban la Eucaristía los domingos a las 8 de la tarde en la Iglesia donde yo asistía,tambien lo hacían los padres de sus alumnos y amigos conocidos,tenían un Colegio cerca.
Te lo digo con rubor que,conectábamos enseguida al comienzo de la Eucaristía.De estas Eucaristías salía enriquecida,riqueza que me duraba varios días.Sentí su marcha,nunca supe el por qué,tampoco hablé nunca con ninguno de ellos pero,tengo la experiencia que te cuento.Con esto quiero decirte que,me duele se les generalice y se les encause por pertenecer a esa Congregación,sé que,no se les señala a todos o cada uno pero,quedan mal parados por su Fundador.De verdad,lo siento.

Bernardo
2 de mayo de 2010 a las 19:33

Creo que la mejor expresión que resume lo sucedido es el dicho popular: "cría cuervos que te sacarán los ojos". Todo el intento involutivo posconciliar se asentó en los nuevos movimientos eclesiales, tanto laicales como clericales, como medio para restar influencia en la Iglesia a las órdenes religiosas, causantes todas ellas de los cambios que llevaron al Concilio Vaticano II. Desde Roma se alentó a estos movimientos y ahora vemos los resultados. No estaría mal que alguien en el Vaticano reflexione seriamente sobre todo esto y de paso eche una miradita a otros movimientos similares a los legionarios de Cristo. Por cierto, no deja de ser curioso el nombre de esta gente, legionarios. A mí me recuerda al endominiado de Gerasa, que tenía un demonio llamado legión y al que Jesús expulsó a una piara de unos dos mil cerdos hacia el mar.

raiz transparente
2 de mayo de 2010 a las 21:09

"Los hermanos viven de su propio trabajo. No aceptan ningún donativo. Tampoco aceptan para sí mismos sus propias herencias, sino que la comunidad hace donación de ellas a los más pobres"

comunidad de taize

Así de claro. Así de transparente. Así de evangélico

valero
3 de mayo de 2010 a las 17:46

Es peligroso generalizar respecto a los movimientos eclesiales, estaríamos haciendo lo mismo que los no creyentes cuando juzgan a la iglesia por lo que leen en los periódicos. No me atrevería ha juzgar sobre quienes sobran y quienes no, en la iglesia. No soy legionario ni conozco a nadie de este grupo eclesial, pero estoy seguro de que habrá quienes en el, se habran encontrado con Jesucristo resucitado. Lo del recelo entre tendencias eclesiales -incluso algo más- es algo que se da en la iglesia desde los tiempos apostólicos,así que no vamos ahora a asustarnos por toda esta controversia. Me reitero en que de toda ésta crisis saldrá vida para la iglesia y vida en abundancia, porque a Dios gracias y a pesar de que todo parece indicar lo contrario, es el Espíritu Santo quien la gobierna. En cuanto a lo de la formación,¿estamos hablando de teología, de exégesis, de hermenéutica o de magisterio? Quizás si se cumpliera más en nosotros aquel deseo de San Pablo " que Cristo tome forma en vosotros" acusaríamos menos la falta formación. El mundo necesita testigos veraces, es decir, Santos, que no teman perderlo todo para ganarlo todo. Perdón por el ramalazo místico. Feliz Pascua

Cruz
4 de mayo de 2010 a las 01:45

Los Legionarios de Cristo deben tener una justicia directa y si debe desaparecer esa congregación, no deberá titubear en ningún momento.Tanta congregación lo que hace es disgregar el cristianismo porque al final se hace política y la misión evangelizadora solamente lo llevan unos pocos a los que se les llama locos. Los jóvenes deben vivir su vida y cuando sean mayores de edad que elijan la vocación que quieran. En cuanto al fundador y a todos los seguidores posteriores para seguir con la congregación yo diría: " dale poder a un hombre y verás de lo que es capaz".

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