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La edad de la comunión no es la cuestión
5 comentariosAprovechando que hace 100 años Pío X decretó que los seis años era una buena edad para hacer la primera comunión, puesto que el niño ya goza de “uso de razón”, el Cardenal Cañizares ha publicado un artículo en L’osservatore romano lamentando que actualmente se tienda a retrasar la primera comunión, y reivindicando para ello una edad temprana. Monseñor Cañizares afirma que hoy se ha adelantado la “madurez” y, por tanto, a los seis o siete años se es perfectamente consciente de lo que se hace. Estoy de acuerdo. Pero siempre que demos por supuestas algunas cosas, que quizá no hay que dar tan por supuestas.
Los seis años es una buena edad para comulgar siempre que el niño tenga una conciencia cristiana adecuada a su edad. Desgraciadamente, muchas primeras comuniones, a los 8, 9 y 10 años, no cumplen esa condición. Hoy el ambiente familiar no propicia esa madurez cristiana. En muchos casos la ceremonia se hace por inercia o costumbre social y familiar. Se aprovecha la ocasión para hacer fiesta, celebrando que la niña o el niño ya empiezan a ser unos mocitos.
Una vez que aceptamos el bautismo de los niños, donde es evidente que no tienen madurez personal para profesar la fe que el rito supone y exige, no veo qué problema puede haber en recibir la eucaristía sin una conciencia suficiente y adulta de lo que es y pide el sacramento. Siempre que ocurra lo mismo que con el bautismo, a saber, que los padres y padrinos se comprometan a educar y acompañar al niño en la fe. En el caso del bautismo este compromiso es dudoso en muchas ocasiones; en paralelo, estamos facilitando primeras comuniones en las que el compromiso de los padres es igualmente dudoso.
El bautismo y la eucaristía deberían ser la culminación de un proceso catecumenal, de una madurez en la fe, de un “haber llegado a ser cristiano”. Una vez que hemos cambiado el orden y aceptado que “primero se les bautice, luego les enseñaremos a ser cristianos” (como decía San Agustín), tampoco habría problema en aceptar que “primero se les imparta la eucaristía, luego les enseñaremos lo que significa y exige”. Donde yo veo problema es en el “luego”. Porque “luego”, con demasiada frecuencia, no ocurre nada. El problema no es la edad, es cómo hacer hoy cristianos. Porque “los cristianos no nacen, se hacen”, decía otro autor antiguo llamado Tertuliano.