Nihil Obstathttp://nihilobstat.dominicos.org/Este blog trata de cuestiones religiosas, teológicas y eclesiales. Busca ser un espacio de reflexión y diálogo.esCopyright 2025 Orden de Predicadores. Todos los derechos reservados.Thu, 24 Apr 2025 00:00:00 +020020Especulaciones sobre el nuevo Papahttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/especulaciones-sobre-el-nuevo-papa/ <![CDATA[ <p>El lunes de Pascua muri&oacute; Francisco. La noticia de su muerte fue portada, con grandes titulares, de los peri&oacute;dicos del d&iacute;a siguiente. Y, junto con la noticia de su muerte, tambi&eacute;n, en la mayor&iacute;a de las primeras p&aacute;ginas, con caracteres destacados, se especulaba sobre qui&eacute;n pod&iacute;a ser su sucesor. El asunto del sucesor interesa. De hecho, mucha gente me ha preguntado qui&eacute;n pienso yo que saldr&aacute; elegido en el pr&oacute;ximo C&oacute;nclave. Dudo que la mayor&iacute;a de esas personas tengan suficiente informaci&oacute;n sobre los cardenales para poder hacer una valoraci&oacute;n adecuada. Los peri&oacute;dicos s&iacute; que hacen valoraciones, algunas condicionadas por su l&iacute;nea editorial.</p> <p>No hablemos de lo que se dice en redes sociales y algunos blogs que pululan por la red, en los que hay de todo, como no pod&iacute;a ser de otra forma, aunque en algunos casos lo que hay es falta de respeto con el Papa difunto. Y lo digo de una forma elegante. Y cuando hacen pron&oacute;sticos sobre el nuevo Papa, me temo que confunden sus deseos con la realidad. Eso dejando aparte que atribuyen a sus candidatos ideas en las que seguramente ellos no se reconocer&iacute;an. Hasta las casas de juego hacen lo que no tiene nada de cristiano, a saber, apuestas sobre qui&eacute;n ser&aacute; el nuevo Papa.</p> <p>Estoy convencido de que el elegido continuar&aacute; la l&iacute;nea de su predecesor, con algunas caracter&iacute;sticas propias. Es lo que ha ocurrido con todos los Papas. Ninguno descalifica a su antecesor. Todos dicen continuarlo. No quiero arriesgarme a hacer pron&oacute;sticos, pero a&uacute;n as&iacute; aventuro que una de las primeras decisiones del nuevo Papa va a ser continuar con el S&iacute;nodo y, por supuesto, dejar claro que el a&ntilde;o jubilar contin&uacute;a con el ritmo ya empezado. Porque en la Iglesia no hay rupturas. Hay estilos distintos, en funci&oacute;n de las personas, como es l&oacute;gico y normal. Pero lo fundamental permanece.</p> <p>En vez de especulaciones sobre qui&eacute;n ser&aacute; el nuevo Papa, lo que ahora toca es dar gracias por la vida y el magisterio de Francisco, convencidos de que Dios gu&iacute;a a su Iglesia y, con sus fallos y deficiencias, porque est&aacute; formada por seres humanos fr&aacute;giles y pecadores (empezando por el Papa), la sostiene para que siga anunciando a las personas de cada &eacute;poca y lugar la buena nueva del Evangelio de Cristo. La referencia de los cristianos no es una ideolog&iacute;a, sino un hombre de carne y hueso, con sus man&iacute;as, un pobre hombre vestido de blanco, pobre en relaci&oacute;n con Aquel del que es Vicario, pobre como esos pobres hombres que somos nosotros, pero signo viviente del Verbo que se ha hecho uno de nosotros.</p> <p>La elecci&oacute;n de los &uacute;ltimos Papas (sobre todo de Juan Pablo II y Francisco) fue una sorpresa. Es posible que en esta elecci&oacute;n tengamos otra. Y un asunto m&aacute;s: una cosa son los cardenales con derecho a voto, y otra los que est&aacute;n en condiciones de desplazarse a Roma, que ser&aacute;n algunos menos. Y a prop&oacute;sito de esos cardenales que no podr&aacute;n estar en el C&oacute;nclave, &iquest;qu&eacute; es lo que preocupa a algunos? Si est&aacute;n en uno u otro bando, seg&uacute;n sus clasificaciones pol&iacute;ticas, trasplantadas al &aacute;mbito eclesial. &iexcl;Penoso! Todo muy penoso.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPThu, 24 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/especulaciones-sobre-el-nuevo-papa/La Iglesia está de lutohttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/la-iglesia-esta-de-luto/ <![CDATA[ <p>Tras doce a&ntilde;os de un intenso pontificado, que no ha dejado a nadie indiferente, ha fallecido Francisco. Es un buen momento para dar gracias a Dios por este Papa, que ha abierto puertas y caminos que, sin duda, marcar&aacute;n la vida de la Iglesia en los pr&oacute;ximos a&ntilde;os. Hay puertas que, una vez abiertas, es dif&iacute;cil cerrar. Y caminos que indican una direcci&oacute;n que quiz&aacute;s el Papa fallecido no ha podido recorrer como hubiera deseado, pero que est&aacute;n ah&iacute; invitando a otros a recorrerlos.</p> <p>Todos los Papas han tenido sus admiradores y sus cr&iacute;ticos. Puesto que el presente nos marca m&aacute;s que el pasado, pudiera parecer que tanto los admiradores como los cr&iacute;ticos de Francisco han hecho m&aacute;s ruido que los de los Papas anteriores. No creo que sea as&iacute;. Ocurre que hoy, con las redes sociales, las noticias, a veces falsas, se difunden muy r&aacute;pido y con mucho griter&iacute;o. Juan XXIII tambi&eacute;n fue, a la vez, admirado y criticado. Se le calific&oacute; como el &ldquo;Papa bueno&rdquo;, pero tambi&eacute;n se dijo que se necesitar&iacute;an, al menos, cien a&ntilde;os, para arreglar el estropicio que hab&iacute;a supuesto el Concilio Vaticano II.</p> <p>Francisco ha sido un buen continuador de ese concilio, consciente de que ya no estamos en los a&ntilde;os 60 del siglo pasado, sino en nuevos tiempos, con nuevos problemas, o con los problemas de siempre agudizados: inmigraci&oacute;n, pobreza, desigualdades, guerra. El Papa tom&oacute; partido desde el primer momento, recordando que el evangelio es buena noticia para todos, pero que los pobres son sus destinatarios privilegiados y que, al atenderles a ellos, estamos atendiendo a Cristo mismo.</p> <p>Dos palabras podr&iacute;an caracterizar a este pontificado: encuentro y misericordia. Encuentro con Dios, por supuesto, y encuentro con cada ser humano, que es sacramento de Dios, en su concreta realidad de dificultad. Encuentro sobre todo con los alejados, para dejarles muy claro que las puertas de la Iglesia est&aacute;n abiertas para ellos. Esto supone acogida, hospitalidad, escucha atenta. Y abrazar a las personas con misericordia. Misericordia que tambi&eacute;n hay que aplicar a la hora de administrar los sacramentos, el de la reconciliaci&oacute;n por supuesto. Pero tambi&eacute;n los otros sacramentos: porque la iglesia, como dijo el Papa, no es una aduana de control, sino una casa de puertas abiertas.</p> <p>&iquest;Quedan cosas por hacer? Naturalmente. Pero este Papa ha logrado una cosa: abrir caminos de di&aacute;logo, abrir puertas para que se pueda escuchar a todos. Hoy se puede hablar con normalidad de una serie de temas que antes parec&iacute;an tab&uacute;: papel de la mujer en la Iglesia y su presencia en puestos de gobierno, necesidad de superar el clericalismo, ministerios laicales, buscar soluciones realistas ante la falta de sacerdotes, acoger a aquellas y aquellos que se sienten excluidos y no comprendidos por su situaci&oacute;n humana o familiar, necesidad de una curia vaticana en la que lo decisivo sea el servicio. Seguramente muchas cuestiones que hoy est&aacute;n en el candelero necesitan madurar todav&iacute;a y hacer sus pruebas. Sigue siendo importante que nos escuchemos unos a otros, que podamos hablar sin necesidad de descalificarnos. La sinodalidad es lo propio de la Iglesia. Posiblemente el gran testamento de Francisco haya sido el S&iacute;nodo de la sinodalidad.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPMon, 21 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/la-iglesia-esta-de-luto/Dios ha dado la razón a Jesúshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/dios-ha-dado-la-razon-a-jesus/ <![CDATA[ <p>No es la cruz lo que explica la vida, las palabras y obras de Jes&uacute;s de Nazaret. Es la vida, las palabras y las obras de Jes&uacute;s lo que explica que terminara crucificado, condenado por las autoridades religiosas y civiles, ante la indiferencia del pueblo. Lo que fue la vida de Jes&uacute;s es lo que explica su muerte. Tampoco es la resurrecci&oacute;n de Jes&uacute;s lo que explica su vida, sus palabras y obras. Lo que fue la vida y la muerte de Jes&uacute;s es lo que permite comprender lo que pudo ocurrir tras su muerte. La vida de Jes&uacute;s estuvo marcada por una idea de Dios, un Dios que ama en toda circunstancia, busca la oveja perdida, acoge a los pecadores, se solidariza con pobres y enfermos, se enfrenta a pr&aacute;cticas religiosas que abruman al ser humano. Lo que pudo ocurrir tras su muerte es una consecuencia de lo que Dios es, del Dios que le habitaba y que &eacute;l anunciaba.</p> <p>En aquel ambiente cultural y religioso, del que participaban tambi&eacute;n las y los disc&iacute;pulos de Jes&uacute;s, hablar de resurrecci&oacute;n de un muerto no ten&iacute;a que sorprender demasiado. Pues bastantes corrientes teol&oacute;gicas de la &eacute;poca cre&iacute;an en la resurrecci&oacute;n de los muertos. Pero las mujeres y los ap&oacute;stoles no anunciaron simplemente la resurrecci&oacute;n de Jes&uacute;s, sino que a &ldquo;este Jes&uacute;s&rdquo; Dios la hab&iacute;a resucitado: &ldquo;a este Jes&uacute;s Nazareno, al que vosotros hab&eacute;is crucificado, Dios le ha resucitado de entre los muertos&rdquo;. A este que vosotros hab&eacute;is rechazado y condenado, Dios le ha dado la raz&oacute;n, resucit&aacute;ndolo de entre los muertos. Lo sorprendente no era el hecho de una resurrecci&oacute;n. Lo sorprendente era que Dios, al resucitar a Jes&uacute;s, daba la raz&oacute;n a Jes&uacute;s, se la quitaba a sus asesinos y se acreditaba como el Dios que Jes&uacute;s hab&iacute;a anunciado.</p> <p>Los disc&iacute;pulos vivieron la muerte de Jes&uacute;s como un fracaso y una derrota. Aquel en el que hab&iacute;an cre&iacute;do, en qui&eacute;n hab&iacute;an visto realizadas sus esperanzas, aquel que se hab&iacute;a puesto al lado de los humildes para entregarles a Dios, un Dios que descalificaba al que anunciaban los escribas, los sacerdotes y los doctores de la ley, hab&iacute;a perdido, hab&iacute;a sido vencido. Quiz&aacute;s Dios era como dec&iacute;an los m&aacute;s fuertes, los que hab&iacute;a matado a Jes&uacute;s, puesto que siempre ganaban. La esperanza de las seguidoras y los seguidores de Jes&uacute;s hab&iacute;a muerto. En la medida en que Jes&uacute;s se hab&iacute;a identificado con una cierta idea de Dios, su muerte era la muerte de esta idea de Dios.</p> <p>Pero de pronto experimentaron que estaba vivo. Entonces comprendieron del todo a su persona y a su mensaje. Y tuvieron el valor de anunciar que, si estaba vivo, eso significaba que su mensaje era el bueno, que Dios le hab&iacute;a dado la raz&oacute;n, que las autoridades se hab&iacute;an equivocado. Y, por tanto, su camino era el que Dios aprobaba. Y que, en su seguimiento, era posible hacer que Dios se hiciera presente en quienes le segu&iacute;an. Y si Dios se hac&iacute;a presente en ellos, entonces era posible, en otras circunstancias, hacer presente a Dios en quienes les escuchaban. En otras circunstancias, claro, porque Jes&uacute;s ya no estaba en la tierra. Estaba con Dios. Pero desde all&iacute; segu&iacute;a animando a los suyos, infundi&eacute;ndoles su Esp&iacute;ritu, acompa&ntilde;&aacute;ndoles en la misi&oacute;n. El Reino de Dios hab&iacute;a llegado con Jes&uacute;s y llegaba con todos los que se identificaban con Jes&uacute;s.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPSun, 20 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/dios-ha-dado-la-razon-a-jesus/Dios abraza a los verdugos de Jesúshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/dios-abraza-a-los-verdugos-de-jesus/ <![CDATA[ <p>El himno de la liturgia de las horas, titulado: &ldquo;&iexcl;Oh cruz fiel, &aacute;rbol &uacute;nico en nobleza!&rdquo;, termina con este verso: &ldquo;T&uacute;, solo entre los &aacute;rboles, crecido, / para tender a Cristo en tu regazo; / t&uacute;, el arca que nos salva; t&uacute;, el abrazo, / de Dios con los verdugos del Ungido.</p> <p>Resulta cuando menos llamativo que el himno diga que la cruz en la que Cristo fue clavado es, ni m&aacute;s ni menos, que &ldquo;el abrazo de Dios con los verdugos del Ungido&rdquo;, o sea, de su Hijo. Jes&uacute;s, en la cruz, por tanto, lejos de condenar a sus enemigos, les abraza. El abrazo es uno de los mejores signos del amor; el abrazo es acogida, es perd&oacute;n, es uni&oacute;n. Jes&uacute;s crucificado ama a quienes le crucifican y este amor revela el amor de Dios hacia todos los seres humanos, incluso hacia quienes se dir&iacute;a, seg&uacute;n nuestros juicios humanos, que menos se lo merecen. Dios rompe todos los esquemas.</p> <p>El evangelista Lucas deja claro que en la cruz en la que Cristo es martirizado hay un desbordamiento de amor. En el momento de morir Jes&uacute;s responde al odio con amor (Ef 2,16: &ldquo;dio en s&iacute; mismo muerte al odio&rdquo;), ama a sus enemigos, hasta el punto de que no solo les perdona, sino que les justifica, ofrece una buena raz&oacute;n al Padre para que les perdone, manifestando la fuerza y el poder de un amor capaz de justificar a sus enemigos: &ldquo;perd&oacute;nales, porque no saben lo que hacen&rdquo; (Lc 23,34). Se dir&iacute;a que Jes&uacute;s se convierte en el abogado defensor de los que lo asesinan.</p> <p>San Gregorio Magno dice que Jes&uacute;s &ldquo;fue el &uacute;nico entre todos los hombres que pudo presentar a Dios s&uacute;plicas inocentes, porque hasta en medio de los dolores de la pasi&oacute;n rog&oacute; por sus perseguidores&hellip; &iquest;Qu&eacute; es lo que puede decirse o pensarse de m&aacute;s puro en una oraci&oacute;n que alcanzar la misericordia para aquellos mismos de los que se est&aacute; recibiendo el dolor?&rdquo;. Gregorio llega a decir que esta sangre es &ldquo;la demanda de justicia de nuestro Redentor&rdquo;, una justicia que se manifiesta en forma de perd&oacute;n, y citando un texto de la carta a los Hebreos que dice que la sangre de Jes&uacute;s habla mejor que la de Abel, escribe: &ldquo;De la sangre de Abel se hab&iacute;a dicho: La sangre de tu hermano me est&aacute; gritando desde la tierra. Pero la sangre de Jes&uacute;s es m&aacute;s elocuente que la de Abel, porque la sangre de Abel ped&iacute;a la muerte de su hermano fratricida, mientras que la sangre del Se&ntilde;or implor&oacute; la vida para sus perseguidores&rdquo;.</p> <p>&iexcl;No hay adjetivos que puedan describir un amor como el de Jes&uacute;s! Es imposible amar m&aacute;s. Solo en un amor como este puede estar la salvaci&oacute;n del mundo. Se trata de un amor incondicional, un amor a pesar de todos los pesares. En la muerte de Jes&uacute;s est&aacute; la fuerza que vence al mundo y el pecado del mundo (cf. 1 Jn 2,2). De ah&iacute; que bien puede decirse que Jes&uacute;s derrama su sangre en la cruz para el perd&oacute;n de todos los pecados: &ldquo;en Cristo estaba Dios reconciliando al mundo consigo, no tomando en cuenta las transgresiones de los hombres&rdquo; (2 Cor 5,19).</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPThu, 17 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/dios-abraza-a-los-verdugos-de-jesus/Poncio Pilato tiene poder, el de la muertehttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/poncio-pilato-tiene-poder-el-de-la-muerte/ <![CDATA[ <p>Seg&uacute;n el contexto en el que se use el t&eacute;rmino poder, puede tener distintos sentidos, que van desde lo mejor (poder del amor) a lo peor (poder que oprime y abusa). Pero en general, cuando empleamos este t&eacute;rmino solemos referirnos, sino a sus aspectos m&aacute;s negativos, s&iacute; al menos a los aspectos que implican fuerza, que se emplea para realizar algo o para oponerse a algo o a alguien. Esta connotaci&oacute;n negativa es la que suele aplicarse a las relaciones entre los humanos basadas en el poder: el m&aacute;s fuerte, en sentido f&iacute;sico, moral, pol&iacute;tico o religioso, impone a los otros sus ideas, sus pretensiones, sus deseos.</p> <p>Los contempor&aacute;neos de Jes&uacute;s se sorprendieron porque &ldquo;hablaba con autoridad&rdquo;. Y comparaban este hablar con autoridad a la manera como lo hac&iacute;an los escribas. Los escribas eran los maestros de la Escritura, hab&iacute;an estudiado en las sinagogas y ten&iacute;an lo que hoy llamar&iacute;amos titulaci&oacute;n para ense&ntilde;ar. Eran considerados &ldquo;maestros de la ley&rdquo; y ten&iacute;an un papel crucial en las sinagogas d&oacute;nde expon&iacute;an y explicaban las Escrituras. Jes&uacute;s les criticaba porque, en el fondo, no eran coherentes con sus ense&ntilde;anzas: impon&iacute;an pesadas cargas a la gente, que ellos eran incapaces de llevar. Jes&uacute;s, por el contrario, era coherente con lo que ense&ntilde;aba. Si dec&iacute;a que hab&iacute;a que amar al enemigo, en la cruz manifest&oacute; el supremo amor a sus enemigos al pedir al Padre del cielo que les perdonase.</p> <p>El poder (o &ldquo;no poder&rdquo;) de Jes&uacute;s resalta cuando lo comparamos con el del cruel gobernador romano Poncio Pilato que, como &eacute;l mismo confiesa, tiene poder para mantener a alguien en vida o para matarlo. Poder de vida y de muerte. Cuando Jes&uacute;s comparece ante el tribunal de Poncio Pilato, &eacute;ste le pregunta si es rey, o sea, si tiene poder. Jes&uacute;s le responde que, si tuviera un poder como el suyo, su gente habr&iacute;a combatido y habr&iacute;a impedido que los jud&iacute;os le prendieran. En realidad, Jes&uacute;s no tiene ning&uacute;n poder. M&aacute;s bien se muestra cr&iacute;tico con el poder de este mundo, porque los poderes de este mundo oprimen y someten. Y &eacute;l siempre respeta la libertad y su modo de convencer es mediante el poder del amor. Jes&uacute;s tiene autoridad, la autoridad del que arrastra y convence. Pilato tiene poder, el poder que oprime y maltrata. El poder indeseable.</p> <p>Resulta bastante ir&oacute;nico que, en el Credo, en la s&iacute;ntesis m&aacute;s acabada y fundamental de la fe cristiana, aparezca un personaje tan cruel e indeseable como Poncio Pilato, y que se diga de &eacute;l que ten&iacute;a &ldquo;poder&rdquo; para matar. Esto indica que la persona de Jes&uacute;s, que no ten&iacute;a ning&uacute;n poder para escapar del poder del tirano, era una instancia cr&iacute;tica con este modo de ejercer el poder. El poder del tirano, a pesar de sus pretensiones, era muy limitado, en realidad era un poder nulo, s&oacute;lo capaz de dar muerte, pero incapaz de dar vida. Dios, el que tiene el todo poder de la vida, y el que nunca abandonaba a Jes&uacute;s, al resucitarlo de la muerte, anul&oacute; totalmente el poder de Pilato y lo redujo a la nada m&aacute;s absoluta.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPSun, 13 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/poncio-pilato-tiene-poder-el-de-la-muerte/Ansia de poder o deseo de servirhttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/ansia-de-poder-o-deseo-de-servir/ <![CDATA[ <p>Servir es una forma de amar, una de las mejores manifestaciones de lo que es amar. Servir es cuidar al otro, estar atento a sus necesidades. Y hacerlo, no esperando una paga por los servicios prestados, sino gratuitamente, sin esperar nada a cambio. Amando as&iacute; reflejamos el amor de Dios, que ama a todos incondicionalmente. Dios nos ama tan gratuita e incondicionalmente, que nos ama y nos perdona cuando somos pecadores. &ldquo;La prueba de que Dios nos ama, dice san Pablo, es que Cristo, siendo nosotros todav&iacute;a pecadores, muri&oacute; por nosotros&hellip; Cu&aacute;ndo &eacute;ramos enemigos fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo&rdquo; (Rm 5,8-9). Cuando &eacute;ramos pecadores, cu&aacute;ndo &eacute;ramos enemigos, Cristo dio su vida por nosotros. No hay mayor amor que dar la vida. Pero dar la vida por el enemigo es el colmo del amor. No es posible amar m&aacute;s. Solo en un amor como ese puede estar la reconciliaci&oacute;n del mundo. Los disc&iacute;pulos de Jes&uacute;s estamos llamados a reproducir en nuestras limitadas vidas, en la pobreza de nuestra condici&oacute;n humana, un amor as&iacute;.</p> <p>El amor cristiano es un amor impregnado de divinidad. Este amor hay que vivirlo en las condiciones de este mundo. La prueba de que es posible nos la dan aquellos que han sabido no devolver mal por mal, hasta el punto de dar la vida por ese hacer siempre el bien. Es el caso de los m&aacute;rtires. La mayor&iacute;a de nosotros no estamos llamados al martirio. Gracias a Dios. Pero conviene que tengamos presente el modelo de Jes&uacute;s y de los m&aacute;rtires. En aras del realismo del amor, vuelvo al &ldquo;entre vosotros nada de eso&rdquo;, que Jes&uacute;s dice a sus disc&iacute;pulos, para dejar claro que lo suyo no puede ser el poder. Porque el poder siempre vive a costa del enga&ntilde;o (&ldquo;se hacen llamar bienhechores&rdquo;), de la mentira y de la opresi&oacute;n. El poder corrompe, y el poder absoluto corrompe absolutamente. Sin duda, en este mundo es necesario organizase. En cuanto nos reunimos m&aacute;s de tres personas, necesitamos ponernos de acuerdo, necesitamos un poco de orden. Nuestras sociedades precisan de personas responsables capaces de organizar la sociedad. En este sentido est&aacute;n revestidas de autoridad. Una autoridad que les ha conferido el pueblo. La autoridad debe ejercerse buscando el bien de los dem&aacute;s. Cuando, en vez de buscar el bien de los dem&aacute;s, uno se aprovecha del encargo recibido, su autoridad se corrompe, deja de ser autoridad y se transforma en poder.</p> <p>La autoridad da siempre ejemplo, el poder busca su propio inter&eacute;s a costa del bien de los dem&aacute;s. La autoridad sirve y el poder oprime. Este es el dilema con el que tiene que enfrentarse el cristiano: ansia de poder o deseo de servir. Tener objetivos claros y al mismo tiempo sublimes es un recordatorio constante de aquello a lo que estamos llamados y un motivo de permanente conversi&oacute;n cuando tropezamos o parece que no llegamos. Pero esta llamada no debe hundirnos. Al contrario, es motivo de alegr&iacute;a y de acci&oacute;n de gracias. Porque el cristiano no es un &ldquo;h&eacute;roe&rdquo; como los que presentan las leyendas de este mundo. Es un pecador. Pero un pecador siempre alumbrado por la luz del Evangelio, una luz que le reconforta y le llama siempre a volver a empezar. Unidos a Cristo siempre hay algo que hacer, aunque solo sea volver a empezar.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPThu, 10 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/ansia-de-poder-o-deseo-de-servir/Documento vaticano sobre el Concilio de Niceahttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/documento-vaticano-sobre-el-concilio-de-nicea/ <![CDATA[ <p>El d&iacute;a 3 de este mes de abril se hizo p&uacute;blico un importante documento preparado durante largo tiempo por la Comisi&oacute;n Teol&oacute;gica Internacional sobre el Concilio de Nicea, celebrado hace 1.700 a&ntilde;os. El documento es largo, no es posible resumirlo y necesita de una <a href="https://www.vatican.va/roman_curia/congregations/cfaith/cti_documents/rc_cti_doc_20250403_1700-nicea_sp.html">lectura</a> tranquila y reposada. El texto recibi&oacute; el dictamen favorable del Papa Francisco, autorizando su publicaci&oacute;n. En el Concilio de Nicea se profes&oacute; que el Hijo, distinto del Padre, que nace y muere, es coeterno e igual a Dios.</p> <p>La fe de Nicea es la fe com&uacute;n a todos los cristianos. Por eso la Comisi&oacute;n Teol&oacute;gica dice que estamos ante una oportunidad inestimable para subrayar que lo que tenemos en com&uacute;n es mucho m&aacute;s fuerte que lo que nos divide. Todos creemos en el Dios Trinidad y en Cristo verdadero hombre y verdadero Dios. La Comisi&oacute;n Teol&oacute;gica aprovecha esta fe com&uacute;n para que sea una oportunidad para avanzar hacia el restablecimiento de la comuni&oacute;n plena entre todos los cristianos. Un signo de esta comuni&oacute;n, que incluso ayudar&iacute;a a avanzar, ser&iacute;a ponernos de acuerdo para celebrar en la misma fecha la fiesta de la Pascua.</p> <p>El documento indica que el t&eacute;rmino clave del concilio de Nicea, el que afirma que el Hijo es de la misma naturaleza del Padre, la palabra griega &ldquo;homo&uacute;sios&rdquo;, puede tambi&eacute;n aplicarse a la consustancialidad del Hijo con los seres humanos. Cristo es &ldquo;homo&uacute;sios con el Padre, pero tambi&eacute;n para con nosotros&rdquo;. Es tan &ldquo;verdadero&rdquo; hombre como &ldquo;verdadero&rdquo; Dios. La comisi&oacute;n teol&oacute;gica habla de &ldquo;doble consustancialidad&rdquo;. M&aacute;s a&uacute;n, &ldquo;las dos caras de esta doble consustancialidad del Hijo encarnado se refuerzan mutuamente para fundar de manera profunda y eficaz la fraternidad de todos los seres humanos. Somos hermanas y hermanos de Cristo seg&uacute;n la unidad de la misma naturaleza humana&rdquo;. El acontecimiento de Jesucristo es inseparablemente comuni&oacute;n con Dios y con todo ser humano.</p> <p>La comisi&oacute;n teol&oacute;gica nota que hoy sigue habiendo dificultades y resistencias para creer en la plena divinidad y en la plena humanidad de Cristo. Es m&aacute;s f&aacute;cil considerar a Jes&uacute;s como un maestro espiritual o un mes&iacute;as pol&iacute;tico que predica la justicia. Pero tambi&eacute;n hay una gran dificultad para admitir la plena humanidad de Cristo, de aquel que puede experimentar cansancio (Jn 4,6), sentimientos de tristeza y abandono (Jn 11,35; Getseman&iacute;) e incluso ira (Jn 2,14-17), y que, de manera misteriosa pero verdadera, ignora ciertas cosas (Mt 24,36). El Hijo eterno vive todo lo que &eacute;l es en virtud de la infinitud de la naturaleza divina, en la debilidad y fragilidad de la naturaleza humana y a trav&eacute;s de ella. Y de esta forma es revelaci&oacute;n del Padre.</p> <p>El Concilio de Nicea debe servir de est&iacute;mulo para que hoy la Iglesia realice, en otro contexto cultural, la misma tarea que all&iacute; se realiz&oacute;, a saber: confesar la fe con unos t&eacute;rminos filos&oacute;ficos que el pueblo entend&iacute;a y que evitaban las imprecisiones y dobles lecturas a las que se prestaban los textos b&iacute;blicos que unos y otros empleaban. Dice el documento de la Comisi&oacute;n Teol&oacute;gica: &ldquo;En circunstancias como las de la crisis arriana, donde la Palabra de Dios parece proporcionar un apoyo ambivalente para la preservaci&oacute;n de la verdad de la fe&hellip; se hace necesario que la expresi&oacute;n especulativa dirima la disputa exeg&eacute;tica&rdquo; Tambi&eacute;n hoy la Iglesia debe utilizar el lenguaje de la cultura para hacer comprensible la fe. Sigue siendo necesario poner el mensaje b&iacute;blico y eclesial en relaci&oacute;n m&aacute;s expl&iacute;cita con los modos de sentir, pensar, vivir y expresarse, propios de cada cultura local.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPSun, 06 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/documento-vaticano-sobre-el-concilio-de-nicea/Peleados por el poderhttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/peleados-por-el-poder/ <![CDATA[ <p>A los ap&oacute;stoles les cost&oacute; comprender qui&eacute;n era Jes&uacute;s y la fuerza de su mensaje. Por eso, en ocasiones, Jes&uacute;s los tacha de &ldquo;hombres de poca fe&rdquo;. Poco a poco Jes&uacute;s les iba instruyendo, con paciencia y pedagog&iacute;a, y as&iacute; avanzaban en la fe y en el conocimiento del Maestro. A veces esta incomprensi&oacute;n sobre la ense&ntilde;anza de Jes&uacute;s llev&oacute; a los ap&oacute;stoles a discutir entre ellos. Una de las discusiones m&aacute;s frecuentes que ten&iacute;an era sobre qui&eacute;n de ellos era el m&aacute;s importante. Cuando esto ocurr&iacute;a, Jes&uacute;s desplegaba toda su pedagog&iacute;a, y buscaba un ni&ntilde;o para abrazarlo y acogerlo. El ni&ntilde;o, en aquella sociedad, era una persona no valiosa, incluso despreciable. En la acogida del ni&ntilde;o por parte de Jes&uacute;s queda claro cu&aacute;les son sus preferidos y con qu&eacute; tipo de personas se relaciona: con los marginados y malqueridos de la sociedad. Pues bien, junto con el gesto, Jes&uacute;s dice a sus disc&iacute;pulos: &ldquo;si uno quiere ser el primero, sea el &uacute;ltimo de todos y el servidor de todos&rdquo; (Mc 9,35). En el contexto en que Jes&uacute;s lo dice podr&iacute;amos interpretar: si uno quiere ser el primero en mi Reino, p&oacute;ngase al servicio de los peor considerados social y religiosamente.</p> <p>Incluso al final de la vida de Jes&uacute;s, despu&eacute;s de estar largo tiempo acompa&ntilde;&aacute;ndole y escuch&aacute;ndole, los disc&iacute;pulos parece que siguen sin enterarse, seguramente porque eso de ser el primero es una tentaci&oacute;n que siempre reaparece. Es la tentaci&oacute;n del poder, esa delicia entre las delicias. Las ganas de mandar, de imponer siempre mi voluntad a los dem&aacute;s. Pues bien, al final de su vida Jes&uacute;s quiso despedirse de sus mejores amigos con una cena. En esa cena Jes&uacute;s hizo algo asombroso, instituy&oacute; el sacramento de su cuerpo y de su sangre. En el momento en que cualquiera pensar&iacute;a que los disc&iacute;pulos estaban asombrados y muy atentos a lo que Jes&uacute;s estaba haciendo, resulta que no, que estaban en otra cosa, en lo suyo, en sus ansias de poder. Seg&uacute;n el evangelio de Lucas (22,24-27), &ldquo;entre ellos hubo un altercado sobre quien de ellos parec&iacute;a ser el mayor&rdquo;. De nuevo Jes&uacute;s debe recurrir a la mejor pedagog&iacute;a, pero esta vez, ya que en aquella cena no hab&iacute;a ning&uacute;n ni&ntilde;o, Jes&uacute;s recuerda lo que hacen quienes mandan en este mundo, a saber, oprimir a los ciudadanos y, encima, en el colmo de la iron&iacute;a, &ldquo;se hacen llamar bienhechores&rdquo;. Jes&uacute;s dice claramente que entre los suyos los criterios de actuaci&oacute;n son totalmente distintos. &ldquo;Entre vosotros, nada de eso&rdquo;, pues el mayor es el que sirve.</p> <p>Los disc&iacute;pulos discut&iacute;an por el poder, o sea, se peleaban, porque el poder conduce necesariamente a la guerra. El poder tiende a ser absoluto, no consiente ser compartido. Por eso, cuando dos buscan el poder, necesariamente se pelean. El poder solo puede ser de uno. Cuando es de dos, ya no es poder. La contrapartida al poder ser&iacute;a la colaboraci&oacute;n, el darse la mano, el servirse el uno al otro: &ldquo;lavaos los pies los unos a los otros&rdquo;, recomienda Jes&uacute;s a los suyos. Los unos a los otros. El servicio aut&eacute;ntico es mutuo. El poder siempre va en una sola direcci&oacute;n, de arriba abajo. El amor y el servicio pueden ir tambi&eacute;n en una sola direcci&oacute;n, cuando uno ama a sus enemigos, a quienes no le aman. Pero el amor pleno va siempre en doble direcci&oacute;n: los unos a los otros. Y cuando es bidireccional todo poder queda anulado. (continuar&aacute;).</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPWed, 02 Apr 2025 00:00:00 +0200https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/peleados-por-el-poder/Videos y robos inapropiadoshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/videos-y-robos-inapropiados/ <![CDATA[ <p>El pasado 23 de marzo el Observatorio de Derechos Humanos Samba Martine (nombre de la mujer africana que muri&oacute;, por no recibir la debida atenci&oacute;n m&eacute;dica, cuando permanec&iacute;a retenida en un Centro de internamiento de extranjeros de Madrid) organiz&oacute; una conferencia bajo el t&iacute;tulo: &ldquo;La trata en nuestra sociedad: una mirada global y local&rdquo;. Si mis datos son buenos, la conferencia se estaba retransmitiendo en cuatro salas: en una de modo presencial y en tres por medio de zoom. Pues bien, la reuni&oacute;n fue saboteada con videos de contenido inapropiado, vamos, de pornograf&iacute;a pura y dura, lo que hizo imposible continuar con la sesi&oacute;n e incluso dificult&oacute; el cierre de la misma. Este es un ejemplo m&aacute;s de los desaf&iacute;os a los que se enfrentan qui&eacute;nes abordan temas tan sensibles y urgentes como la trata de personas.</p> <p>La t&eacute;cnica moderna es maravillosa cuando se utiliza para bien. Pero es nefasta cuando con ella se busca hacer el mal. El problema no es la t&eacute;cnica (y dicho sea de paso el problema no es la inteligencia artificial), sino el modo de utilizarla y lo que se pretende hacer con ella. D&iacute;gase lo mismo de cualquier otro medio. La lengua humana es maravillosa, pero como dice la carta de Santiago &ldquo;con ella bendecimos al Se&ntilde;or, y con ella maldecimos a los seres humanos, hechos a imagen de Dios; de una misma boca proceden la bendici&oacute;n y la maldici&oacute;n&rdquo;.</p> <p>Hablando de inteligencia artificial puedo contar un caso reciente del que tengo informaci&oacute;n de primera mano. Una buena persona recibe una llamada telef&oacute;nica. Al otro lado del tel&eacute;fono hay una voz muy conocida, de un personaje importante para ella. La voz le pide una serie de cosas y de datos, y la persona que ha recibido la llamada la hace caso. Resulta que la voz ha sido creada con inteligencia artificial. Yo aconsejo que, en caso de recibir llamadas as&iacute;, sobre todo si piden dinero o datos bancarios, aunque parezca que quien llama es la propia madre, antes de hacerle caso, hagan alguna pregunta cuya respuesta solo ella pueda conocer. Recuerdo que un dominico anglicano (s&iacute;, &iexcl;hay dominicos anglicanos!) un d&iacute;a me llamo desde bastante lejos, me pidi&oacute; un peque&ntilde;o favor, y me dijo: para que veas que soy yo, te voy a dar el nombre de &ldquo;nuestra abuela&rdquo;. Al principio me despist&oacute;, pero cuando me dijo: &ldquo;se llama Juana&rdquo;, comprend&iacute; enseguida. Juana es el nombre de la madre de Santo Domingo de Guzm&aacute;n, &ldquo;el padre&rdquo; de los dominicos.</p> <p>Voy a contar una an&eacute;cdota de la que soy protagonista. No ca&iacute; en la trampa. Por eso la cuento: hace unos quince a&ntilde;os recib&iacute; una carta de un supuesto eclesi&aacute;stico conocido de un pa&iacute;s europeo. En el sobre hab&iacute;a un cheque, que todav&iacute;a conservo, de 225.000 libras esterlinas. Ya saben: una moneda m&aacute;s valiosa que el d&oacute;lar o el euro. En la carta me ped&iacute;a que ingresara el cheque en una cuenta m&iacute;a, que enviara 200.000 libras a una cuenta de un pa&iacute;s africano, de una supuesta instituci&oacute;n caritativa, ya que (me dec&iacute;a el falso corresponsal) desde su pa&iacute;s no era posible hacer esa transacci&oacute;n. Y a&ntilde;ad&iacute;a (tentando mi ambici&oacute;n y mi ego&iacute;smo) que me quedar&aacute; 25.000 libras esterlinas para &ldquo;mis gastos&rdquo; o &ldquo;mis pobres&rdquo;. Moraleja: si alguien le pide o le ofrece dinero y no es cara a cara, piense que es una estafa. Si es cara a cara, usted ver&aacute; lo que hace.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPSat, 29 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/videos-y-robos-inapropiados/Desobediencia correcta, obediencia incorrectahttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/desobediencia-correcta-obediencia-incorrecta/ <![CDATA[ <p>Los tiempos han cambiado. En realidad, no han cambiado los tiempos, el tiempo pasa. Lo que cambia, al menos en algunos, es la mentalidad, tanto a niveles personales, como sociales y eclesiales. Antiguamente, en la Iglesia y en la sociedad, la obediencia era presentada como una de las mejores virtudes, era lo que se esperaba del buen ciudadano y del buen creyente, hasta el punto que de que los grandes maestros espirituales sol&iacute;an decir: el que obedece nunca se equivoca. Hoy, la obediencia est&aacute; un tanto desprestigiada, sobre todo cuando por obediencia se entiende una sumisi&oacute;n, sin reservas, a la autoridad. Curiosamente quienes suelen quejarse de falta de obediencia suelen ser siempre los superiores, los que mandan. Ya es m&aacute;s extra&ntilde;o que esos que mandan se planteen si mandan mal.</p> <p>Al respecto recuerdo que un t&eacute;cnico nuclear jud&iacute;o, Mordejai Vanunu, que pas&oacute; 18 a&ntilde;os en las c&aacute;rceles israelitas por desvelar el programa de fabricaci&oacute;n de armamentos nucleares, que conoc&iacute;a de primera mano en raz&oacute;n de su trabajo, dijo ante sus jueces: &laquo;Una acci&oacute;n como la m&iacute;a ense&ntilde;a a los dem&aacute;s que el propio razonamiento, el de todo individuo, no es menos importante que el de los jefes. &Eacute;stos se sirven de la fuerza y sacrifican a millares de personas en el altar de su megaloman&iacute;a. No les sig&aacute;is a ciegas&raquo;. Mordejai Vanunu y muchos otros -en los estados laicos y en los estados religiosos, de unas y otras culturas-- han desobedecido a las autoridades pol&iacute;ticas y religiosas en nombre de una autoridad m&aacute;s imperiosa y, lo que es m&aacute;s importante, m&aacute;s sana y m&aacute;s humana: la autoridad de la propia conciencia.</p> <p>Hay una par&aacute;bola de Jes&uacute;s en la que unos personajes obedecen y obedecen mal. Su obediencia es incorrecta. En la misma par&aacute;bola, otro personaje desobedece y su desobediencia es correcta. Se trata de la par&aacute;bola del samaritano misericordioso. Las costumbres, convertidas en leyes, dejaban claro que entre los jud&iacute;os y los samaritanos no era posible ning&uacute;n trato. Costumbre y ley que ten&iacute;an su desgraciado fundamento en el odio. La par&aacute;bola quiere poner de manifiesto que la ley, cuando es expresi&oacute;n de odio, es mala, mal&iacute;sima. Y que lo bueno, buen&iacute;simo, es desobedecerla. Los dos cl&eacute;rigos de la par&aacute;bola se alejan del herido, quiz&aacute;s porque su sentido de la obediencia les mov&iacute;a a llegar a tiempo al culto. Mientras que el samaritano, desobedeciendo a la ley, obedece a una instancia superior a la ley, como es su conciencia que le mueve a amar.</p> <p>El evangelista Lucas cuenta otra historia en la que tambi&eacute;n aparece un samaritano que desobedece a la ley y, sin embargo, hace lo correcto. Es esa historia de diez leprosos que se acercan a Jes&uacute;s para ser curados. La ley mandaba que, si quedaban curados, deb&iacute;an presentarse a los sacerdotes para que certificaran que estaban en condiciones de reintegrarse a la sociedad. Una vez curados, nueve leprosos cumplieron la ley y fueron a ver a los sacerdotes. Uno de los leprosos, un samaritano, en vez de cumplir la ley, regreso a dar las gracias a Jes&uacute;s. El desobediente hizo lo correcto, fue agradecido, sin duda porque ten&iacute;a un coraz&oacute;n lleno de amor.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPTue, 25 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/desobediencia-correcta-obediencia-incorrecta/¿En qué consiste la vida eterna?https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/en-que-consiste-la-vida-eterna/ <![CDATA[ <p>&iquest;Es posible atisbar en qu&eacute; consiste la bienaventuranza definitiva, la felicidad eterna que Dios tiene preparada para los salvados, para aquellos que le aman, para sus elegidos? En una palabra, &iquest;es posible describir en qu&eacute; puede consistir el cielo, la vida celestial?</p> <p>Cuando Tom&aacute;s de Aquino se pregunta en qu&eacute; consiste la vida eterna, dice que en ella confluir&aacute;n estos cuatro aspectos o dimensiones: En primer lugar, la uni&oacute;n con Dios: &ldquo;&eacute;l es el premio y el fin de nuestros trabajos&rdquo;. Como Dios es inefable, sorprendente, est&aacute; m&aacute;s all&aacute; de todo lo que podamos pensar, desear e imaginar, se comprende que Santo Tom&aacute;s no desarrolle en demas&iacute;a en que puede consistir esta uni&oacute;n con Dios.</p> <p>Tambi&eacute;n consiste la vida eterna en la plena saciedad de todo deseo. All&iacute; tendremos todo lo que deseamos y esperamos. En esta vida nada ni nadie puede saciar nuestras aspiraciones. Esto solo puede hacerlo Dios, que las sacia y sobrepasa infinitamente. Si se desean deleites, all&iacute; estar&aacute; el sumo y perfect&iacute;simo deleite, que es Dios mismo. Si se desean honores, all&iacute; estar&aacute; el m&aacute;ximo honor. El santo, haciendo gala de buen humor, pone un ejemplo de esos honores que deseamos en este mundo y que se cumplir&aacute;n en el otro: &ldquo;los hombres sobre todo desean ser reyes u obispos, seg&uacute;n sean seglares o cl&eacute;rigos; ambas cosas las conseguir&aacute;n all&iacute;&rdquo;. En tercer lugar, la vida eterna consiste en la seguridad perfecta. En este mundo no la hay, porque cuantas m&aacute;s cosas queremos, tanto m&aacute;s tememos perderlas y tantas m&aacute;s necesitamos.</p> <p>Finalmente, el santo a&ntilde;ade algo muy interesante. Me da la impresi&oacute;n de que prolonga a la vida eterna una de las ense&ntilde;anzas fundamentales de Jes&uacute;s y del Nuevo Testamento, a saber, que el amor a Dios y al pr&oacute;jimo son inseparables en la vida presente y lo ser&aacute;n tambi&eacute;n en la vida futura. Compartir con otros la alegr&iacute;a de los bienes divinos acrecentar&aacute; nuestra bienaventuranza. Dice el santo: la vida eterna &ldquo;consiste en cuarto lugar en la compa&ntilde;&iacute;a de todos los bienaventurados, la cual ser&aacute; agradabil&iacute;sima&hellip; Pues cada uno amar&aacute; al otro como a s&iacute; mismo, por eso se alegrar&aacute; con el bien de los dem&aacute;s como si fuera propio&rdquo;. El bien ajeno no ser&aacute; motivo de envidia (como ocurre en este mundo), sino de una inmensa alegr&iacute;a. Sto. Tom&aacute;s termina citando el Salmo 87: &ldquo;y cantar&aacute;n mientras danzan: todas mis fuentes est&aacute;n en ti&rdquo;.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPFri, 21 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/en-que-consiste-la-vida-eterna/San José, el santo más glorioso de la Iglesiahttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/san-jose-el-santo-mas-glorioso-de-la-iglesia/ <![CDATA[ <p>San Jos&eacute; es el santo m&aacute;s glorioso de la Iglesia. En la jerarqu&iacute;a de los santos, es el primero despu&eacute;s de Mar&iacute;a. Por eso, su nombre aparece en todas las plegarias eucar&iacute;sticas, despu&eacute;s del de la Virgen Mar&iacute;a. La Iglesia reconoce la dignidad y grandeza de san Jos&eacute; debido a su papel central en la historia de la salvaci&oacute;n: es el esposo de la Madre de Dios y es el Padre legal de Jes&uacute;s. Jos&eacute; ha sido el hombre en qui&eacute;n Dios ha depositado su confianza para que cuidara de Mar&iacute;a y de Jes&uacute;s. Durante la vida p&uacute;blica de Jes&uacute;s, Jos&eacute; est&aacute; oculto, ausente. A partir de este dato algunos infieren que Jos&eacute; muri&oacute; en Nazaret acompa&ntilde;ado de su familia. El himno latino de Laudes de la solemnidad de san Jos&eacute; dice que &ldquo;Cristo y la Virgen le asistieron en su hora postrera, con rostro sereno&rdquo;. Por eso, Jos&eacute; es el patrono de los agonizantes que, junto con los t&iacute;tulos anteriores y con el de Patrono de la Iglesia universal, tal como proclam&oacute; P&iacute;o IX, constituyen su corona inmortal.</p> <p>Jes&uacute;s naci&oacute; en una condici&oacute;n de gran debilidad. Tuvo necesidad de ser defendido, protegido, cuidado. Jos&eacute;, hombre fuerte, justo y valiente, busc&oacute; y prepar&oacute; un lugar acogedor para que Jes&uacute;s pudiera nacer, se encarg&oacute; de defenderle cuando Herodes buscaba matarlo, le protegi&oacute; cuando vivieron como emigrantes en un pa&iacute;s extranjero, le cuid&oacute; cuando era adolescente, trabaj&oacute; honradamente para asegurar el sustento de su familia, para que tuvieran techo y el alimento necesario. &ldquo;La felicidad de Jos&eacute;, escribi&oacute; el Papa Francisco, no est&aacute; en la l&oacute;gica del auto-sacrificio, sino en el don de s&iacute; mismo. Nunca se percibe en este hombre la frustraci&oacute;n, sino s&oacute;lo la confianza. Su silencio persistente no contempla quejas, sino gestos concretos de confianza&rdquo;.</p> <p>Custodiar es algo muy propio de un cristiano. Dice Francisco: &ldquo;Custodiar la vida, custodiar el desarrollo humano, custodiar la mente humana, custodiar el coraz&oacute;n humano, custodiar el trabajo humano. El cristiano es &mdash;podemos decir&mdash; como san Jos&eacute;: debe custodiar. Ser cristiano no es solo recibir la fe, confesar la fe, sino custodiar la vida, la propia vida, la vida de los otros, la vida de la Iglesia&rdquo;. Custodiar no es imponer, es atender con paciencia y con amor; no es dominar, sino servir; no es poseer, sino lavar los pies; es acompa&ntilde;ar, respetando la libertad; es levantar al ca&iacute;do sin reprenderlo ni humillarlo. En la Iglesia debemos custodiarnos mutuamente, porque todos somos d&eacute;biles y pecadores. A este respecto resulta oportuna la pregunta que formula Francisco: &ldquo;cuando tengo un problema con alguien, &iquest;trato de custodiarlo o lo condeno enseguida, hablo mal de &eacute;l, lo destruyo?&rdquo;</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPMon, 17 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/san-jose-el-santo-mas-glorioso-de-la-iglesia/En todo deseo late un deseo de Dioshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/en-todo-deseo-late-un-deseo-de-dios/ <![CDATA[ <p>El ser creados &ldquo;para Dios&rdquo;, del que habl&aacute;bamos en el art&iacute;culo anterior, es una consecuencia directa e indisociable del ser creados &ldquo;por Dios&rdquo;. Dado que el &ldquo;por Dios&rdquo; es constitutivo de lo humano y no desaparece nunca, es posible encontrar en el humano una serie de deseos e insatisfacciones, que son una huella de este deseo de Dios que anida en toda persona, aunque no sea consciente de que se trata de un deseo de Dios. Tom&aacute;s de Aquino afirm&oacute; que todo deseo es un deseo de Dios. Lo que todos buscamos y deseamos es ser felices, buscamos lo que consideramos bueno para nosotros. Cuando hacemos el mal tambi&eacute;n buscamos lo bueno, aunque nuestra vista se equivoque en la determinaci&oacute;n de lo bueno. Buscamos el bien que vemos o imaginamos ver en el mal que hacemos.</p> <p>En este mundo nunca encontramos plenamente el bien y la felicidad. Siempre nos falta algo: algo de belleza, algo de salud, algo de fuerza, algo de saber, mucho de amor. Siempre estamos incompletos y buscamos m&aacute;s. En ning&uacute;n terreno el hombre se contenta con metas parciales e incompletas. Feliz solo ser&iacute;a el que estuviera plenamente colmado en todas las dimensiones y aspectos de la vida. Se comprende as&iacute; esta afirmaci&oacute;n de Tom&aacute;s de Aquino: &ldquo;el hombre no es perfectamente bienaventurado mientras le quede algo que desear y buscar&rdquo;. &iquest;Qui&eacute;n podr&aacute; colmar al ser humano? &iquest;Qui&eacute;n llena de bienes los anhelos humanos? Detr&aacute;s de todas las b&uacute;squedas, late siempre un deseo de Dios. Dice Tom&aacute;s de Aquino: &ldquo;todos, en cuanto apetecen sus propias perfecciones, apetecen al mismo Dios&rdquo;. Planteado as&iacute; el asunto, resulta claro que todo deseo, es un deseo de Dios.</p> <p>Incluso desde posiciones ateas es posible ver el deseo de Dios en toda vida humana. Cuando Jean Paul Sartre dice que el hombre es &ldquo;una pasi&oacute;n in&uacute;til&rdquo;, su afirmaci&oacute;n presupone que el hombre es una pasi&oacute;n de divinidad. Seg&uacute;n el fil&oacute;sofo franc&eacute;s el hombre pretende, ni m&aacute;s ni menos, que ser dios. Pero como Dios no existe, el hombre es una pasi&oacute;n in&uacute;til. Hay, pues, seg&uacute;n este autor, un anhelo, un deseo de Dios en el ser humano, que es imposible satisfacer. Este anhelo de Dios, que se manifiesta incluso cuando el ser humano niega a Dios o se aleja de &eacute;l, es una vieja historia que aparece desde los inicios de la humanidad. El libro del G&eacute;nesis narra que una serpiente astuta se dirigi&oacute; a la primera mujer y le dijo: si desobedec&eacute;is a Dios no morir&eacute;is, ser&eacute;is como dioses (Gen 3,1-5). La serpiente promete aquello que el ser humano m&aacute;s anhela: el anhelo de ser como dioses y el deseo de inmortalidad. La serpiente miente, porque indica un mal camino, pero lo que ella promete es lo que los humanos m&aacute;s deseaban.</p> <p>Seg&uacute;n Unamuno el amor busca siempre la plenitud y por eso nos revela lo eterno. Ocurre que, en este mundo, cada vez que el amor ve realizado su anhelo, se da cuenta de que en realidad buscaba mucho m&aacute;s: &ldquo;la satisfacci&oacute;n de todo anhelo, dice este autor, no es m&aacute;s que semilla de un anhelo m&aacute;s grande y m&aacute;s imperioso&rdquo;. Si el amor busca siempre m&aacute;s y, por eso, tiende a lo eterno, no es extra&ntilde;o que Unamuno acabe afirmando: &ldquo;el amor es un contrasentido si no hay Dios&rdquo;.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPThu, 13 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/en-todo-deseo-late-un-deseo-de-dios/Creados por Dios y para Dioshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/creados-por-dios-y-para-dios/ <![CDATA[ <p>La primera parte del <em>Catecismo de la Iglesia Cat&oacute;lica</em> est&aacute; dedicada a explicar la profesi&oacute;n de fe cristiana. La fe es la acogida del Dios que sale al encuentro del ser humano. Se comprende as&iacute; que el Catecismo comience por plantear si el ser humano est&aacute; en disposici&oacute;n de encontrar a Dios. Porque el encuentro entre dos seres personales supone que, por parte de ambos, hay deseo de realizar este encuentro. Es l&oacute;gico, pues, que el Catecismo comience afirmando que &ldquo;el deseo de Dios est&aacute; inscrito en el coraz&oacute;n del hombre&rdquo;. Y eso es as&iacute;, lo sepa o no lo sepa, porque este deseo es propio de la criatura humana, es algo con lo que se nace. No es un deseo que aparezca despu&eacute;s de nuestro nacimiento. Viene ya como marca de origen.</p> <p>El Catecismo indica inmediatamente que este deseo innato de Dios con el que todos nacemos se debe a que &ldquo;el hombre ha sido creado por Dios y para Dios&rdquo;. Por Dios: la raz&oacute;n, el motivo de nuestro ser, es que Dios nos ha querido y, por eso, nos ha dado la vida. El es nuestro autor. &ldquo;El nos hizo y somos suyos&rdquo;, dice el salmo 99. Nos hizo: pero no como hace el director de un laboratorio. Nos hizo por amor. No por necesidad. Y somos suyos: pero no como las cosas tienen un propietario, sino con una relaci&oacute;n de filiaci&oacute;n. Somos suyos porque somos sus hijos. Y todo padre deja en el hijo una marca de su propio ser. El hijo comparte la vida que el Padre le ha dado, tiene sus genes, y si se trata de un buen padre, como bueno es Dios, entonces no solo tiene sus genes, tiene todo su amor. El amor de Dios est&aacute; inscrito en lo m&aacute;s profundo de nuestro ser.</p> <p>Pero no solo hemos sido creados por Dios. Hemos sido creados &ldquo;para Dios&rdquo;, o sea, para tener con &eacute;l una profunda relaci&oacute;n de amor. El es nuestro destino, la meta de nuestra vida. Si estamos hechos para &eacute;l, eso significa que hasta que no nos encontremos con &eacute;l nuestra vida no se sentir&aacute; colmada, porque no habr&aacute; alcanzado aquello a lo que tiende, aquello que le es m&aacute;s propio. El &ldquo;para&rdquo; indica una finalidad. E indica tambi&eacute;n un camino. De modo que la meta no es algo que venga dado con el origen, sino que pide un proceso de acercamiento y de conocimiento. El conocimiento es causa del amor, porque solo se puede amar aquello que se conoce. Por tanto, haber sido hechos para Dios implica un proceso por parte del ser humano.</p> <p>Porque hemos sido hechos para Dios, a&ntilde;ade el Catecismo, &ldquo;Dios no cesa de atraer el hombre hacia s&iacute;&rdquo;. Dios siempre va en busca del ser humano y siempre est&aacute; dispuesto a acogerle. Pero para que haya encuentro es necesario que el humano vaya en busca de Dios. Para eso es necesario que &ldquo;reconozca expl&iacute;citamente ese amor de Dios y se entregue a su Creador&rdquo;, a&ntilde;ade el Catecismo, citando al Concilio Vaticano II. En ese lugar del Concilio citado por el Catecismo se reconoce que muchos de nuestros contempor&aacute;neos no perciben esta necesidad de encontrarnos con Dios o la rechazan expl&iacute;citamente. O sea, el ate&iacute;smo es una posibilidad que est&aacute; implicada en el hecho mismo de ser creados &ldquo;para Dios&rdquo;. Porque el &ldquo;para Dios&rdquo; implica necesariamente la libertad humana y la conciencia de la bondad divina (Continuar&aacute;).</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPSun, 09 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/creados-por-dios-y-para-dios/Jesús tentado comprende a los que son tentadoshttps://nihilobstat.dominicos.org/articulos/jesus-tentado-comprende-a-los-que-son-tentados/ <![CDATA[ <p>Cuando el primer domingo de cuaresma se lee el evangelio de las tentaciones de Jesús, la tendencia de bastantes predicadores es interpretar que el relato tiene una función pedagógica: es un estímulo para que los creyentes no nos dejemos llevar por la tentación, pero en realidad el relato no dice nada sobre Jesús, porque a él la tentación no le afectó. Como Jesús no podía pecar, porque era Dios, la tentación necesariamente tiene un carácter ejemplar; Jesús fue tentado para darnos ejemplo. Pero si Jesús no fue realmente tentado, si la tentación no tuvo en él ninguna influencia, si no era &laquo;pecable&raquo; (otra cosa es que fuera pecador), entonces, mas que ante un buen ejemplo, estamos ante una buena comedia. Lo ejemplar en este relato es que Jesús fue realmente tentado, pero fue capaz de vencer la tentación. La tentación no es algo que necesariamente conduzca al pecado, pues es posible, desde nuestra condición humana, vencer la tentación siempre que nos apoyemos en Dios.</p> <p>La tentaci&oacute;n es lo propio de los seres humanos. Todos, en muchos momentos de la vida, nos preguntamos qu&eacute; camino debemos tomar. Algunos caminos son muy seductores. Pero alguno de esos caminos no nos conviene, porque nos hace da&ntilde;o, aunque de entrada parezca atractivo e interesante. Eso es la tentaci&oacute;n: sentirse atra&iacute;do por lo malo que toma apariencia de bien. Como Jes&uacute;s fue verdadero hombre, nada queda fuera de su humanidad. Su solidaridad con nosotros implica que tambi&eacute;n tuvo que exponerse a los peligros y amenazas de ser humano. El no pasa de puntillas por nuestra historia, por nuestra condici&oacute;n, sino que entra hasta el fondo y camina por los barros que tantas veces nos enfangan a todos. As&iacute; Jes&uacute;s puede comprender a los que son tentados.</p> <p>Detr&aacute;s de las tres tentaciones que tuvo Jes&uacute;s subyace una misma pregunta: &iquest;qu&eacute; es lo verdaderamente importante para la vida humana? &iquest;El af&aacute;n de riquezas o el compartir?, &iquest;el poder o ayudar a los d&eacute;biles y necesitados?, &iquest;el prestigio y la ostentaci&oacute;n o la solidaridad? La tentaci&oacute;n busca que nos apartemos de Dios, seduci&eacute;ndonos con algo que parece m&aacute;s urgente e importante, m&aacute;s atractivo. La tentaci&oacute;n no invita directamente a hacer el mal. Eso ser&iacute;a muy descarado, muy burdo; pr&aacute;cticamente nadie caer&iacute;a entonces en la tentaci&oacute;n. La tentaci&oacute;n finge mostrar algo mejor que la fe y la confianza en Dios, algo m&aacute;s concreto: el pan o el dinero, la fama o el prestigio, y el poder, esa delicia entre todas las delicias.</p> <p>&ldquo;Si eres Hijo de Dios, di a esta piedra que se convierte en pan&rdquo;. El tentador es h&aacute;bil. Ni siquiera pone en duda que Jes&uacute;s es Hijo de Dios. Lo que hace es se&ntilde;alar un camino, aparentemente muy eficaz, para ser Hijo de Dios: reparte pan para todos y te aclamar&aacute;n como su gran benefactor. &ldquo;Si eres Hijo de Dios, t&iacute;rate de aqu&iacute; abajo (desde el alero del templo), porque est&aacute; escrito que los &aacute;ngeles cuidar&aacute;n de ti&rdquo;. El tentador indica que el camino del prestigio y de la ostentaci&oacute;n piadosa es un mejor camino para demostrar su filiaci&oacute;n divina que la mansedumbre y la pobreza. Tambi&eacute;n hoy hay qui&eacute;n necesita una religi&oacute;n-espect&aacute;culo: apariciones milagrosas, sangre que sale de determinadas im&aacute;genes, una espectacular semana santa.</p> <p>En la otra tentaci&oacute;n que relata el evangelista Lucas, se promete a Jes&uacute;s el poder y la gloria de todos los reinos de la tierra porque el tentador afirma que son suyos y &eacute;l se los da a qui&eacute;n quiere. Cuidadito, cuidadito: el poder es del diablo y lo reparte entre sus amigos. Por suerte el poder que seduc&iacute;a a Jes&uacute;s era el poder del amor. Y el amor, de entrada, parece d&eacute;bil, aunque al final resulta ser lo &uacute;nico valioso.</p> ]] Martín Gelabert Ballester, OPFri, 07 Mar 2025 00:00:00 +0100https://nihilobstat.dominicos.org/articulos/jesus-tentado-comprende-a-los-que-son-tentados/